Rubén Hita, representante de la Federación Andaluza de Taekwondo, conoció la Fundación hace 5 años en el embalse de Colomera. Allí se cruzó con un grupo de residentes que ese día se encontraba en la zona realizando actividades de ocio. Sintió la necesidad de colaborar y no se lo pensó. Podría ofrecer lo que mejor sabe hacer: enseñar la disciplina deportiva que es su gran pasión, el Taekwondo.
Este profesor, que montó una escuela hace años, es entrenador nacional y cinturón negro 5º Dan de Taekwondo. Es uno de los más afamados y reconocidos entrenadores de esta disciplina, no sólo a nivel local o autonómico, sino a nivel nacional e internacional. Que colabore con nosotros realizando este proyecto adaptado e inclusivo, que tanto beneficia a las personas que atendemos, no tiene precio, aunque afirma que el privilegio es suyo “Emoción, es la palabra que define lo que siento cuando entreno con ellos. Siento especial debilidad por ayudar y defender a otros con diferentes cualidades”.
Desde que Rubén empezó a colaborar con el área de deportes de la Fundación -ahora Club Deportivo-, ha estado dando clases a 12 chicos que a lo largo de estos años se ha observado, -sean cuales sean sus capacidades- una mejora con el entrenamiento de este arte marcial. Como ejercicio físico de coordinación, destreza, fuerza… les ayuda en su vida cotidiana. Mejora de movilidad articular de su tren superior y fortalecimiento de sus músculos, ayudándoles a desenvolverse mejor.
Cada año asisten a una concentración con escuelas de toda Andalucía e incluso venidos desde Portugal, donde se examinan de los diferentes niveles, traducidos en el color del cinturón. La mayor parte de los pupilos de este gran maestro poseen ya el azul, a falta de dos más para llegar al negro.
Agradecemos a la Federación Andaluza de Taekwondo, y en especial a Rubén, por su pasión y constancia, y por su atención a las necesidades individuales de los participantes. Esperamos y deseamos que el proyecto dure muchos años más.
